Fábregas, un empresario barcelonés harto de la aburrida cotidianidad de su despacho, decide una mañana de primavera emprender un viaje. Lo que en un principio parecía que iba a ser un paréntesis en su vida, se convierte en una odisea.
Un libro raro. Muy raro. Una novela que me ha dejado aturdido. Un protagonista sin planes en la vida que halla una familia de locos. Una protagonista que se casa con él como segunda opción. Personajes esperppénticos. Final extraño al que, comprendemos, está abocado el libro desde el principio. No es un libro común. La lectura es fluida, pero no sencilla. Es curioso que no sea el prota sino el narrador el que interpreta lo que está sucediendo. No creo haber comprendido el libro en toda su extensión.