Puro chick lit hispánico y además con grandes pinceladas/brochazos del mundo médico. Me ha recordado a Rebeca Rus si se hubiera dedicado a la cosa médica en lugar de a la publicitaria. Es una novela sin más pretensión que hacer pasar un buen rato y en mi caso lo consiguió sobradamente. Es entretenida, las historias son graciosas y la prota, un poco pánfila ella pero con suerte en la vida y muy buen corazón, te cae bien. No se le puede pedir más a una novela ligera.